La importancia de los patrones dietéticos saludables en la prevención de enfermedades crónicas

Articulo Patrones dieteticos

Las enfermedades crónicas no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la obesidad, la diabetes, las enfermedades respiratorias crónicas y el deterioro cognitivo se encuentran entre las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo.

El aumento exponencial de estas enfermedades tiene un vínculo causal con los patrones dietéticos globales que lamentablemente se están occidentalizando cada vez más.

El patrón de dieta occidental se caracteriza por altos niveles de grasas y carnes procesadas, granos refinados, grasas saturadas y trans, sal, azúcares y, en definitiva, presencia de alimentos industriales y ultraprocesados.

Un reciente estudio publicado en la revista Nutrients muestra como diferentes patrones dietéticos saludables han demostrado grandes beneficios para la salud y su papel en la prevención de enfermedades crónicas:

Comparación de componentes nutricionales entre diferentes opciones de dieta saludable
Comparación de componentes nutricionales entre diferentes opciones de dieta saludable

A continuación, se presenta la definición de cada uno de ellos:

Dieta Mediterránea

La dieta mediterránea se caracteriza por una base de cereales sin refinar y una variedad de frutas, verduras, hortalizas, legumbres ricas en micronutrientes, fibra y fitoquímicos.

El pescado, la carne blanca y los huevos como principales fuentes de proteína y productos lácteos principalmente bajos en grasa. El aceite de oliva sirve como fuente principal de grasa y se complementa con aceitunas, frutos secos y semillas.

Los estudios muestran beneficios para la salud como la reducción del riesgo cardiovascular y en la presión arterial, mejoras en biomarcadores inflamatorios relacionados con la aterosclerosis, así como en el colesterol HDL.

Dieta DASH

La dieta DASH deriva su nombre del estudio Dietary Approaches to Stop Hypertension, que evaluó la influencia de los patrones dietéticos en la presión arterial.

Se consume una gran variedad de vegetales, frutas, legumbres, productos lácteos bajos en grasa, granos integrales y varias fuentes de proteínas. Sugiere, además, limitar el sodio a 3g por día o < 2300 mg/día.

Se ha demostrado que puede lograr reducciones en la presión arterial y colesterol LDL. Además, disminuye el riesgo del síndrome metabólico, enfermedad cardiovascular y de diabetes.

Dieta MIND

La dieta MIND combina elementos de la dieta mediterránea y DASH con el objetivo de mantener la salud cognitiva a lo largo de la tercera edad.

Se enfoca en aumentar la ingesta de frutas y verduras frescas, así como verduras de hoja verdes, nueces, legumbres, granos integrales, pescados, aves y aceite de oliva. Los alimentos como los dulces, las carnes procesadas, la comida rápida o frita están limitados por sus riesgos para la salud cerebral.

La adherencia a esta dieta se ha relacionado con la prevención del deterioro cognitivo y un mejor rendimiento del mismo. Además se asoció con una reducción del riesgo de enfermedad de Alzheimer.

Dieta Nórdica

Un patrón dietético nórdico incluye verduras de hoja verde, hortalizas, frutas, pescado y marisco, patatas, bayas, cereales integrales, frutos secos, productos lácteos bajos en grasa, aceite de soja y consumo limitado de carne roja y azúcar.

La dieta nórdica ha demostrado mejorar el perfil de lípidos en sangre, mejora de la presión arterial y mejora de la sensibilidad a la insulina.

Dieta Asiática

Algunas dietas basadas en Asia, como la tradicional coreana, china o japonesa, son particularmente relevantes. Principalmente se componen de arroz, cereales integrales, alimentos fermentados, sopas, fideos, soja, verduras, frutas, pescados, mariscos y muy bajas en carne.

Se han asociado con efectos positivos en la composición corporal, así como disminución de la circunferencia abdominal y con efectos favorables sobre la presión arterial.

La alimentación define la salud de las personas, su crecimiento y desarrollo. La promoción de una dieta saludable se basa frecuentemente en reducir la grasa saturada y la ingesta calórica y aumentar la de frutas, verduras y fibra. Por ello, un patrón de dieta saludable debe reunir las cualidades de variedad, equilibrio y adecuación, junto con las características de un estilo de vida saludable.

Alejandro Monzó Elvira. Dietista-Nutricionista. COL. CV01348